miércoles, 29 de febrero de 2012

Difícil elección

Soy un desastre de persona.
A veces pienso blanco; a veces, negro.
Hay un tema personal; que hoy hago público, que quiero compartir con vosotros. No creo en determinados conceptos. No creo en el siempre ni en el jamás. Quizás en el quizás.

Los tatuajes nunca me han llamado la atención por eso mismo. Porque son para "siempre". Pero en el fondo, me encantaría poder llevarme a la tumba parte de mis pensamientos. Para ello, debe de ser un pensamiento estable, consistente y que "nunca" cambie a lo largo de la vida.

Solo tengo 25 años, y la vida me ha dado un par de palos. No muchos, la verdad.
Hay tres cosas que me gustaría tatuarme por todo lo que significa... Y me gustaría hacerme uno cada 25 años. El primero es un símbolo del que me enamoré perdidamente. Y debe de ser el primero por su significado. Un reloj de arena con alas. 
La primera vez que vi este símbolo fue hace muchos años. Me fui con un amigo al cementerio que está al lado de mi casa (muy recomendable por cierto) y sin duda lo que más me llamó la atención fue una fuente que está a la entrada. Sobre la fuente, un obelisco. Y sobre el mismo un reloj de arena con alas. 
Al entrar apenas me fijé, pero después de dar un par de vueltas por los panteones, mi mente empezó a divagar sobre la vida y esas cosas filosóficas que a veces pensamos. Al salir me encontré de frente con este obelisco. Y fue muy grande el mensaje que aportaba a los millones de Malagueños que habían pasado por allí: "Disfruta tu vida" "Aprovecha tu tiempo" "El tiempo vuela".
Vivos estaremos unos 80 años (al menos eso espero por mi parte) y muertos una larga eternidad ("Siempre"). ¿Qué mejor forma de recordarme este sabio mensaje a tan temprana edad?

La vida va siguiendo su curso. De aquí a los 50 me habrán pasado mil cosas y habré vivido otras tantas. Muchas veces caeré para luego levantar. A esa edad mi vida estará medio resuelta. Apenas podré cambiar determinadas cosas que hice en el pasado (mi presente). Pero a veces puede que haya cosas que no ocurran tal y como yo quiera. Habrá veces que me sumerja en algún pantano oscuro y me cueste salir a la luz. 
Y en este caso, la naturaleza me da una idea bastante acertada. 
En este mundo, hay de todo. Luz y oscuridad. No todo lo hermoso está a la vista. En los pantanos, donde el agua es oscura y la luz del sol apenas penetra unos centímetros sin llegar al fondo, hay vida.
En especial, hay un matojito verde que poco a poco se abre paso hasta la superficie. Una vez allí, una pequeña flor empieza a nacer. Poco a poco.
Cuando la flor se hace fuerte y se abre, tenemos ante nosotros una de las flores más coloridas y bonitas que podemos encontrar. Y quizás, esa luminosidad contrastada con el fango negro del pantano, hace que la flor de loto sea una de mis plantas favoritas. 

Y vamos a los 75 años. Desde ahora en adelante tengo muchos años para pensar como condensar un par de pensamientos. Actualmente me gustaría poder resumir una frase en una palabra o en algún símbolo. Al llegar a esa edad me gustaría verme en la compañía de alguien. Alguien que me cuide, que esté a mi lado, que me respete, que me mire con amor y cariño; y sobretodo, que "siempre" esté ahí. 
"El amor es algo que cuando llega te da la vida, y cuando se va te la quita".
Quizás sea un poco absurda intentar representar esta frase cuando tengo el reloj de arena y la flor de loto.
El amor no es dependencia. Es compartir. Y no creo que nadie haya muerto de amor en sí. Cuando amas a alguien y ese alguien te deja, sufres como si se hubiese muerto. Mismo sufrimiento físico y psicológico.
Pero a la misma vez pienso, que si llegas a esa edad y esa persona que está contigo ha estado allí... ese amor que se va te quita parte de tu vida porque parte de ella se va con esa persona. 

Claro que si esto ocurre, bien puedo mirar mi flor de loto y hacerme fuerte pensando que de lo más oscuro del pantano, una planta insignificante lucha y sale a la superficie. Además de observar mi reloj de arena y disfrutar de lo que la vida me depare.

En cualquier caso, sigo creyendo en el amor y en esta frase. No a mis 25 años porque me queda mucha vida y mucha gente a la que conocer y amar. Pero quizás si a los 75. 
De todas formas, aún queda mucho para pensar como simbolizar esta frase que hice mía.

El tiempo lo dirá. 
Quizás, "nunca" me haga un tatuaje. O a lo mejor me lo hago y "siempre" estará conmigo.


Muy buenas noches, y disculpen esta rallada mental.
Simplemente, me apetecía desahogarme. 
Muak.

2 comentarios:

  1. Los tatuajes son para siempre, pero si simbolizan algo, ese algo, independientemente de que te lo tatúes o no, también estará para siempre. Así que menos tonterías y más tinta en vena.

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  2. Hey, increíble historia, bastante motivadora, es más me sacaste unas lágrimas. Más que decidido a tatuarme un reloj...

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